CAPIRULO 1.6: ESPARTANINA

“…Ningún diputado de la Asamblea Federal podrá atentar contra la integridad física de otro… quién incurra en este delito le será removida su inmunidad parlamentaria y puesto a la orden del poder Judicial. Se aplicarán los procedimientos de ausencia absoluta previstos en esta constitución…”

Extracto de la Constitución de la República Federal de Venezuela, año 2016.

María Karina es la primera diputada más votada de la Asamblea Nacional, José Borjas es el segundo diputado más votado, ambos pertenecen a la bancada de oposición. El martes 2 de mayo fueron brutalmente golpeados por sendos Gladiadores del Circo Romano inaugurado por el sanguinario Junodado Cónsul de la Nueva Roma y aspirante a César.

 

Una semana más tarde José Borjas aún convaleciente de la paliza se prepara para ir de nuevo a su curul. Su esposa le ruega pensar en sus pobres hijos y huir del país. Pero Borjas jamás hará cosa tal. “Son ellos los que deben ir a prisión, si dejo de ir habrán ganado”, responde.

José se despide de sus hijos a lo lejos mientras estos juegan. Aborda su vehículo azul y se aleja de casa mientras su esposa llora desconsoladamente.

Al llegar a la asamblea, José estaciona su vehículo y al salir recibe una ingrata sorpresa. Su hija Espartanina se ha venido de polizón en el asiento trasero.

 

-¡Nina! ¿Por qué te viniste?

-Papi quería acompañarte hoy en el trabajo, para darte buena suerte- Responde la tierna niña.

-Mi amor no puedes venir, acá es peligroso, hay gente muy mala, te pueden hacer daño.

-Papi por eso fue que vine, para que no te vuelvan a hacer daño nunca más.

Borjas lo piensa varias veces. El podría mandar la niña de regreso con uno de sus escoltas pero un presentimiento, lo invita a cambiar de parecer.

-Te quedas quietecita donde yo te diga y si algo sale mal te escondes, ¿vale?

-Tranquilo Papi vas a ver que todo va a salir bien.

José llega entre los gritos y burlas de un público apostado en el palco, mientras los diputados gladiadores del régimen le arrojan basura y escupen. Se sienta en su curul y su niña al lado izquierdo. José toma el bolso de Hello Kitty con rueditas y lo acomoda para no estorbar.

-¡Esto si pesa mi amor!, ¿Qué llevas allí?

-Libros Papi.

-Voy a hablar con esas monjas del colegio, los obligan a traer cosas que seguro no van a usar

De pronto se escucha el sonido de las Tubas Romanas para anunciar la presencia del Consul Junodado. La horda de bárbaros sacude el hemiciclo convertido en arena.

Junodado está en lo alto del presidio del “Coliseo”, adornado con una alegoría al monte Olimpo y rodeado de los placeres de Baco, flanqueado por Diosa y Rosita, una vestida de Venus y la otra de Cleopatra.

 

El tribuno se pone de pie y procede a leer el edicto del Cónsul Junodado:

 

“Su excelentísima majestad el Cónsul Junodado Calígula Descabello ordena a todos los Cristianos que se dobleguen y reconozcan la magnificencia de Casi-o Bruto Nicodemo César, hincándose en medio de la arena y besándole el anillo al Cónsul. Quién no lo hiciese será diezmado y martirizado por los Patriotas Guerreros Gladiadores del Imperio Cubano y luego devorado por los perros salvajes. Igual como la semana pasada”.

 

Los diputados de la bancada de oposición estallan en carcajadas en pleno desafío al nuevo orden. José Borjas se pone de pié para hablar en nombre de todos los “Cristianos”:

 

-Esta bancada de diputados amantes de la democracia, ha decidido de forma unánime no reconocer a ningún César, ni Cónsul, ni Gladiadores ni nada que se le parezca. Dudamos de la magnificencia y legitimidad de Nicodemo y aclaramos ante la opinión pública nacional e internacional, que él no es Casi-o Bruto, sino Bruto Pleni, o sea, bruto completo. Por cierto Descabello, ¡…SEAS RIDICULO CHICO!

La ira estalla en la turba del palco y de inmediato el Gladiador Maikel el Triturahuesos se pone de pie y pide permiso al Cónsul para despedazar al adversario. A lo que el Cónsul responde:

-Tiene el permiso.

 

De inmediato las cámaras se apagan y los celulares son recogidos por un esbirro del SIBOL. Los escoltas son retirados lejos de sus escoltados para evitar tentaciones heroicas.

Borjas mira todo el movimiento a su alrededor. La pesadilla ha comenzado.

Lentamente el Gladiador Maikel se acerca a la curul de Borjas para someterlo. Borjas permanece de pie y dispuesto una vez más a defenderse aunque no tenga mucho éxito.

-Nina escóndete- le murmura pero ésta no le hace el mayor caso. No así sus compañeros de bancada que proceden a esconderse debajo de sus curules, casco en mano.

-¿Jeje qué te pasa, tas cagao? ¿Cómo que la semana pasada no te afinqué bien el puño y ahora vienes por más?- Dice Maikel sonriente mientras le da de cachetadas a Borjas y este trata de esquivarlas.

En medio del abuso se escucha una diminuta sonrisa. Maikel mira hacia abajo y ve a Espartanina.

-Miiira vale, ¿te trajiste a la carajita pa que te defendiera?- y le propina un último bofetón a Borjas -¿De qué te ríes muchacha gafa?-

-Mira papá que ridículo se ve este señor con un colador de pasta en la cara- continúa riendo Espartanina – No me llamo gafa, me llamo Espartanina Borjas y me reía de este dibujo que hice de ti con tu lengua clavada del escritorio de papá.

Cuando el iracundo Triturahuesos lanza el puñetazo contra la humanidad de la indefensa niña, ésta en una magistral aplicación de una llave de Aikido coloca su puño sobre el escritorio y con un creyón lo clava. Luego el asesino trata de liberarse con la otra mano pero esta termina también clavada del escritorio con otro creyón. Maikel mira con terror a Espartanina cuando esta le arrebata el casco, mete su diminuta mano dentro de su boca y le saca la lengua, que también termina clavada en medio de sus dos manos.

-¡Oooo guacala! te huele feo la boca, ¿Sabes? debes cepillarte tres veces al día, los dientes de abajo se cepillan acaia arriba y los dientes de arriba se cepillan hacia abajo- Sentencia la tierna niña ante la mirada atónita de su padre.

Los forenses del CICPC pasan horas tratando de entender, cómo una niña de 4 años clava de esta forma a un sujeto, inmovilizándolo y sin que los creyones se partan. Mientras Maikel aún grita.

 

-¡SAHEME DE AIIII NOOOBA!-

El Gladiador “Manoepiedra” Faria se pone de pié y pide permiso al Cónsul Junodado para arremeter contra la “agresora”

-Tiene el permiso.- Responde el Cónsul.

 

Manoepiedra es excelente peleador. Cuando pelea con hombres usa mano pelada, pero cuando pelea con mujeres, se pone sus manoplas con puntas de calavera.

Farías sube rápidamente al palco y desde allí ejecuta un clavado certero contra la humanidad de la pequeña Espartanina. Espartanina logra ver la sombra que rápidamente oscurece su alrededor y de inmediato, cual tortuga, se escuda con su bolso de Hello Kitty.

 

En las afueras del Palacio Legislativo un grupo de choferes se reúne en torno a una estatua que conmemora la independencia. Con tristeza se quejan de ver que ha sido vandalizada.

-¿Cómo es posible? ¡Ya no hayan que robarse!- Dice uno de los choferes.

 

-¿Qué ganancia le sacan a una placa de hierro de cinco centímetros de espesor? ¡Eso pesa como un yunque!- Responde el otro.

-El que se roba un yunque o una piedra de amolar, no se puede llamar ladrón, sino guapo para cargar- sentencia de manera poética el chofer más viejo.

Farías el Manoepiedra yace en el suelo convulsionando del dolor. Fractura abierta en tres partes del brazo derecho y todos los dedos de esa mano, cercenados debido al aplastamiento de la manopla, es el resultado de su envestida contra el misterioso contenido del bolso de Espartanina.

 

La Diputada Nancy la “Encantadora de Perros” no pide permiso al Cónsul para abrir la jaula donde se encuentra media docena de Rotteweilers salvajes. Con un bastón eléctrico la horrenda bruja ordena a los perros devorar al pequeño monstruo fascista autopista.

 

Borjas está aterrado, ahora si es verdad que se fregaron. Espartanina ha colocado su bolso sobre el pecho del Manoepiedra y saca de su bolsillo delantero una pequeña bolsa de Alimento para Perros. Estando a menos de medio metro de Espartanina, las bestias salvajes se rinden a sus pies y comen de forma frenética pero disciplinada. El perro líder de la manada se arroja sobre Espartanina pero para devorarla a lamidas, gesto que es seguido por el resto de los perros.

-¡PAPI PAPI, estos perros tan bellos, nos los llevamos para la casa, di que si porfa, siiii!-

Borjas montado sobre su curul responde –No se mi corazón, esos perros tienen dueña- y señala a la “Encantadora”.

Espartanina haciendo pucheros se despide de los perros indicándoles que deben volver con su ama. Los perros obedecen pero con una actitud no muy sumisa frente a su ama.

-Papi mira lo que los perros le hacen a esa señora. Papi creo que esos perros se acaban de quedar sin ama. No los vamos a dejar en la calle abandonados, pasando hambre y frío- Responde Espartanina con la mirada grande y llorosa, hacia su aterrado padre.

-Bueno mija, nos los llevamos pero recuerda que tener perros es una gran responsabilidad- Responde Borjas llevándose la mano a la cabeza.

De pronto otro par de Gladiadores se pone de pié para pedir permiso y abatir a la “terrorífica hija de Chuky”. Es el Dúo “Moco de Gorila”, Sierra y Judas Sánchez. Uno armado con un flagellum y el otro armado con una red.

 

-Tienen permiso.- Responde el Cónsul sudoroso y abochornado.

Espartanina se sube al lomo de uno de sus nuevos perros a enfrentar a los dos patiquines. Los bomberos tardaron casi seis horas en desenredar la red  el flagellum y los cuerpos del penoso dúo.

 

Borjas en medio del desastre llama a su casa y es atendido por la dulce nana de sus hijos:

-Aló residencia de los Borjas, le habla Chepina, ¿con quién tengo er gusto?-

-Es José, Chepina, caramba todavía no reconoce mi llamada por celular?

-Ay si señorito que pena, diga usted ¿para que soy buena?-

-Chepina hay algo que tenemos que hablar sobre la niña, tiene un comportamiento un poco diferente hoy y definitivamente creo que tiene que ver con la alimentación.

Chepina se sonroja y asume una angustiosa actitud.

-Ay señorito yo sabía que usted argún día se iba a enterar.

-¿De qué Chepina?

- Es que… Jay no sé… Verá había mucha escases de leche y yo por más que iba de un mercado al otro no conseguía. Sus hijos no podían andar pasando hambre y la teta de la mamá no era suficiente para los tres. Así que valientemente me puse al frente de la mala situación y decidí preparar una caraotas como me las enseñó mi madre que en paz desclace, se las licué en la Licuadora esa Cuisine que ustedes tienen, que licúa finito, casi cremita, y le metí de eso a los tres muchachos. También les metí sopa de lagarto, lentejas, arvejas, mondongo, garvanzo y pasticho de berenjena con carne molida, usté sabe, para la alimentación balanceada. Desde que tenían dos meses hasta que cumplieron los tres años que ya podían comer con cucharilla.

Borjas no puede creer lo que sus oídos acaban de escuchar.

Detrás de él, está Espartanina amarrando una improvisada rienda, en la que están atados los perros, a una de las dos columnas que sostienen el palco. Luego con la bolsa de comida para perros los anima a halar la columna, mientras la horda clama pavorosamente por sus vidas.

-Mire señorito aquí uno de los niños quiere hablar con usted- dice Chepina.

-Aló papi, es José, mira aquí por Twitter están hablando de #Espartanina, ¿será que la próxima semana nos llevas?-

- Sí hijo a lo mejor- Responde Borjas, ante el gesto afirmativo del diputado Rodríguez del Táchira – ¿Por cierto que están haciendo?- Se escucha el estruendo del palco demolido sobre las cabezas de los oficialistas.

-Jugando a la mecánica con el carro de mamá, le bajamos el motor entre los dos y la caja porque tenía una fuguita de aceite.

-Ah ok, ¿y cómo bajaron el motor?

-¡Con la mano papá!-

El diputado Rodríguez toma fotos de Espartanina montada en su perro y Borjas le reclama, por qué le toma fotos.

-¡Mijo, para los afiches de las próximas elecciones!, mientras tanto te la traes para todas las sesiones.

En medio de la destrucción dejada por la demolición del palco, Espartanina al lomo de su fiel perro Rotteweiler, bautizado “Nipy”, observa un viejo sillón Colonial de estilo Andalúz, sobreviviente de la época de Guzmán Blanco.

Yonmaikel, escolta de Borjas recorre el pasillo donde permanecen acuartelados el resto de los escoltas. Gorra en mano exige a sus deudores el pago oportuno de las apuestas perdidas. Hasta que llega al puesto de Yeferson y Bobure, escoltas de Junodado.

-Bueno mis panas, apostaron y peldieron, así que es hora de pagá, ustedes saben, negocios son negocios.

Sin queja ni amague los dos esbirros arrojan sendos fajos de billetes al gorro de Yonmaikel, pero tienen la mirada fija ante lo que será el último número de la función de hoy. Yonmaikel voltea y asombrado propone una nueva apuesta:

-¡SEÑORES MIR BOLOS A QUE SE LO PEGA!-

Junodado orgulloso y con la frente en alto procede a colocarse su casco de gladiador. No porque quiera bajar a la arena a derrotar a Espartanina en un combate final, sino para proteger su hermoso y lozano rostro del bólido de madera maciza, que se le aproxima de manera veloz e indefectible.
 

 

La sala situacional del PUFS parece la emergencia de un hospital público. No hay un diputado oficialista que no haya sufrido las consecuencias del Circo Romano, al revés. Pero de entre todos los heridos tres llaman la atención de Nicodemo, Villagas, Rizarrisa y Marino Silva.
 

-¿Y ustedes por qué están así si no estaban en la asamblea?
 

-Pues estábamos haciendo nuestro trabajo. Teníamos que hacer algo para mostrar en una cadena y  salir bien parados de este desastre. Ya Espartanina es hasta más popular que Ernesto y todos hablan de ella- Responde Villagas.
 

-Nos fuimos de emergencia a Hollywood para hablar con Oliver Stone y entre los cuatro hicimos un guión. Pero Oliver nos advirtió que el único con la tecnología para hacer un video con ese guión es George Lucas- Continúa Rizarrisa.

 

-Le preguntamos a Oliver en cuanto tiempo podíamos tener ese video y él nos dijo que, con el dinero suficiente, medio día. Así que como el dinero no era nuestro problema nos lanzamos hasta Lucas Films. Cuando llegamos a la antesala, había un afiche gigante de Marina Karina, golpeada y alcancé a leer un mensaje en inglés sobre la violencia contra las mujeres. Estaba adornada con unas rosas gigantes, del tamaño de mi puño. Entonces, este par de idiotas comenzaron a burlarse y a hacer chistes asquerosos. Yo como soy un tipo serio, me retiré y le pregunté a las recepcionistas, el por qué de ese afiche. Las recepcionistas furiosas me contaron que “El Jefe” y Maria Karina habían sido novios en Princeton- Villagas echa un ojo con un ademán de molestia contra sus compañeros y continúa el relato.

 

-Yo me di la vuelta para salir del lugar, pero era demasiado tarde. Tres Chubacas y una docena de Troopers nos cayeron encima- relata Villagas.

-Nos arrojaron del Halcón Milenario, golpeados y desnudos, en un basurero de las Vegas. Caminamos por horas hasta que conseguimos a Calixo Cara de Chigüire abrazado a un hidrante a las afueras del Casino de Cesars Palace. Él nos regaló estas camisetas ridículas y nos consiguió una colita para volver- Finaliza Villagas.

 

Marino Silva llora desconsoladamente y Nicodemo le pregunta -¿Por qué lloras?¿Qué te hicieron?, ¡cuéntanos!
 

Villagas y Rizarrisa protestan contra Marino para que no diga nada. Pero Nicodemo insistió, que era una orden, que contara. Entre gimoteos Marino cuenta el motivo de su tormento:
 

-Es que nos golpearon, nos robaron… ¡pero esos yanquis creídos de mierda, NO NOS VIOLARON!
 

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